lunes, 26 de agosto de 2013

Dos propuestas para perder el miedo al barefoot



Este verano he tenido la oportunidad de descubrir dos de las rutas más famosas de los pirineos catalanes, el camí del Isard y el estany del Gerber, ambos en el parque nacional de aiguestortes, siendo sin duda uno de los mejores parajes que he encontrado para iniciarse en el barefoot.

El Cami del Isard.


Como llegar ( en catalán)

distancia: 12 km ( ida y vuelta)
Desnivel 300 metros
tiempo estimado :3 h

La mítica ruta que une Espot con el estany de Sant Maurici, nos brinda un espectacular paisaje que recorre por sendas el parque. El desnivel es prácticamente nulo y el terreno, fresco y agradable haciendo que nuestros pies empiecen a despertarse de su largo letargo. Recomiendo su disfrute en compañía de la familia en un paseo de algo más de una hora (solo ida) o si estamos algo más preparados una ligera carrera que nos transportara a tiempos donde la palabra crisis y estrés aun no se habían inventado.

La ruta que mejor se adapta a todos los niveles es la que iniciamos en el parquing de Prats de Pierró iniciando la ruta por el camino adaptado a personas con movilidad reducida, una pasarela de madera de poco más de 400 metros que nos hará de alfombra roja para nuestra excursión descalzos. Al finalizar dicha pasarela, el camino se torna estrecho sobre un terreno blando y húmedo, sorteando alguna raíz y piedra y teniendo la posibilidad durante todo el camino de poder parar a remojarnos los pies en el riachuelo que discurre en paralelo. No obstante, si es nuestra primera incursión en el barefoot no recomendaria llegar al estanque descalzo, ya que el  último tramo, al cruzar el ultimo puente de madera justo donde encontraremos un cartel que muestra el estanque a 20 minutos, se vuelve empinado por una pista maltratada por los 4x4 llena de graba punzante.


Estany de Gerber



Distancias: 8 Km ( ida y vuelta)
Desnivel positivo acumulado: 330 metros 
Tiempo estimado: 3h

La segunda propuesta es algo más técnica, con más desnivel y algún tramo de tartera en el que tendremos que sortear grandes bloques de piedra perfilada por la nieve y el viento, nada que nos pueda lastimar pero que nos mantendrá atentos a cada paso. Recomiendo meter los pies en cada uno de los tres lagos que nos encontramos por el camino y si no disponemos de unos pies curtidos realizar el descenso calzados.

No hay comentarios:

Publicar un comentario